Un poeta vive enamorado hasta el fin de sus días.

Y fue a esa edad... Llegó la poesía a buscarme.
No sé, no sé de dónde salió,
de invierno o río.
No sé cómo ni cuándo,
no, no eran voces, no eran palabras, ni silencio,
pero desde una calle me llamaba,
desde las ramas de la noche,
de pronto entre los otros,
entre fuegos violentos
o regresando solo,
allí estaba sin rostro
y me tocaba.

Pablo Neruda

domingo, 20 de marzo de 2011

A ella…MÁS CERCA DE LA LUNA

Y qué más da que sea grande la luna,
si más grandes son tus ojos que la anhelan,
si más grande es tu belleza amor,
y tu melena.  Que la vea,
que vea la luna esa melena,
ese cabello que con sus rayos llena.
¡Oh! Luna. Hoy eres grande…
¿Pero bella? Más bella es ella.
Que con sus marrones ojos brilla,
como tú lo haces entre las estrellas.
Entras en mi cama por la ventana,
hoy más brillante, más cerca, más bella…
Pero… ¿quién? ¿Tú o ella?
Ojalá fuera ella, Luna, ojalá ella fuera.
Pero eres tú, la que mi sueño vela,
blanca, te miro, y me contestas,
como si ella desde su sueño
también, Luna, a ti te viera.

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